De sobra es conocido el calvario del Athletic en los últimos años. La falta de gol y de un delantero centro de garantías desde la retirada de Aritz Aduriz. La sombra de esta falta sobrevoló San Mamés este sábado hasta Íñigo Cruzeta y Asier Villalibre Desobstruyeron la portería de ‘Conan’ Ledesma. En los últimos momentos, Iñaki Williams, utilizado tantas veces como ‘9’ sin serlo, completó el triunfo (3-0) ante un Cádiz estéril.
El décimo aniversario del nuevo San Mamés se celebró con juego y ambición por parte del equipo de Valverde. Dominaron el balón en la primera parte, con Sancet y De Galarreta como fuentes de creación, pero no pudieron abastecer a sus delanteros. El propio Sancet había animado a su audiencia con dos balones al travesaño.
Todo se torció en el minuto 66, cuando Guruzeta cazó un caramelo en forma de centro de Óscar De Marcos y abrió la lata. Ledesma, en un mal comienzo, ayudó mucho. Apenas un minuto después fue sustituido por Vilallibre, delantero centro suplente, que estuvo a un paso de regresar al Alavés en el pasado mercado de verano por el esperado olor del banquillo. Se intercambiaron y se entregaron la batuta del gol. ‘El Búfalo’ se encontró con un balón dentro del área tras un mal despeje de Escalante y en su primer contacto con el balón lo mandó al fondo de la red.
Sin Nico Williams, Iñaki se vio obligado a ser quien proporcione desborde por las bandas. Lo intentó de todas las formas posibles y fue quien permitió al equipo estirarse y crear espacios entre líneas. SíSu esfuerzo se vio recompensado, ya que decidió el partido sobre la bocina. tras un envío largo de Unai Simón que cabeceó Villalibre para darle el tercero al mayor de Williams.
El sueño europeo de los vascos, tanto aficionados como jugadores, tenía que basarse en Nico Williams, Sancet y Galarreta, pero ahora también puede basarse en sus delanteros. No hay meta que no llegue para siempre.