Las repercusiones del triunfo de Milei en América Latina – DW – 20/11/2023

El shock político que ha provocado el triunfo de Javier Milei plantea interrogantes en la región, dada la naturaleza disruptiva de muchas de sus declaraciones de campaña y la gran incógnita de cómo gobernará realmente. Los observadores lo describen como impredecible. Más allá de las habituales felicitaciones que los presidentes latinoamericanos han enviado al ganador de las elecciones argentinas, las primeras señales en el ámbito internacional dan que pensar.
Según la agencia EFE, el expresidente brasileño, Jair Bolsonaro, asistirá a la toma de posesión de Milei el próximo 10 de diciembre, tras haber recibido una invitación. Por otro lado, hay rumores de que el presidente Luiz Inácio Lula da Silva no lo hará. Un mal preámbulo diplomático para las relaciones entre los dos grandes países sudamericanos y ejes del Mercosur.
Pero, según el politólogo César Augusto Chamorro, graduado de Potsdam, Alemania, la realidad probablemente prevalecerá. “Milei se da cuenta de que todo lo que dijo en campaña no es tan factible en la realidad. Porque Argentina necesita a Brasil, necesita a la región, no se puede cerrar”, afirma. En este contexto, pronostica que Lula intentará un acercamiento. “Y Milei se verá obligada a aceptarlo, porque la propia industria argentina no puede seguir ese tipo de política. Porque es casi imposible, es autodestrucción. Los propios bancos argentinos, las familias propietarias de los bancos argentinos, no pueden seguir la política que él planea. Porque también es autodestrucción”, considera.
Una estrategia que podría imitarse
Sin embargo, el resultado de la segunda vuelta argentina tiene profundas repercusiones en la región. “Estamos viendo el surgimiento de otros tipos de liderazgos de extrema derecha en toda América Latina”, dice a DW Cristóbal Rovira, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Católica de Santiago de Chile. “Quienes están tratando de profesar ideas similares a las de Milei en Chile, en Perú o en otros países latinoamericanos, observan lo que sucede allí y ven que es un tipo de estrategia que eventualmente debería ser imitada”, explica.
El académico chileno señala también que parte del éxito no corresponde sólo a Milei, sino también a la derecha convencional, en referencia al partido PRO, del expresidente argentino Mauricio Macri, que finalmente apoyó al populista de derecha. “Creo que es otro llamado de atención sobre lo que podría pasar en otros países latinoamericanos, donde la derecha convencional está muy rápidamente dispuesta a establecer una alianza, a veces tácita y otras más explícita, con esta extrema derecha, para acceder al poder. “.
Contra la derecha convencional
A juicio de Rovira, Milei es un caso más en el marco de una ola que recién comienza a surgir en América Latina. “Lo que me preocupa mucho es que no podemos entender el ascenso de estas ultraderechas sin su capacidad de terminar fagocitando a la derecha convencional, que es lo que terminó pasando en el caso de Brasil, es lo que está pasando en el caso de Argentina. “Y eso es lo que en cierta medida también estamos observando en el caso chileno, donde hay un diálogo muy fluido entre la derecha convencional y la extrema derecha; y quien termina ganando en ese diálogo es simplemente la extrema derecha”, afirmó. análisis.
Esto es lo que predice que sucederá en el caso argentino. “Independientemente de lo que pase mañana con Javier Milei, mi apuesta sería que el partido de Macri va a desaparecer, no necesariamente como organización, pero en términos de su ideología política terminará siendo la versión luz de esa extrema derecha.”
Chamorro tiene una interpretación diferente: “Detrás de Milei está el ex presidente Macri. Macri es el ganador de las elecciones. Aún conserva su poder”, dice.
Rasgos “aislacionistas”
Ambos analistas coinciden en que habrá que esperar para ver cómo gobernará realmente Milei. Mientras Chamorro prevé que su proyecto de liberalización comercial le llevará a abrirse a pactos con otros países a este nivel, Rovira destaca el carácter “aislacionista” de este tipo de liderazgo, que intenta aplicar sus políticas sin mayor diálogo ni coordinación con sus vecinos. .
Refiriéndose a su país, el politólogo chileno afirma que “proyectos que eventualmente podrían requerir coordinación entre ambos países, temas de cambio climático, temas energéticos, temas migratorios, van a ser muy difíciles de llevar a cabo. En parte porque tenemos una izquierda gobierno, que es todo lo contrario a lo que es Milei, pero, independientemente de quién esté en La Moneda, este tipo de liderazgos no tienen interés en las relaciones multilaterales. Las buenas costumbres se van a mantener, pero tratar de avanzar en una mayor integración va ser extremadamente difícil”.
Más allá de los efectos inmediatos, el profesor de la Universidad Católica de Santiago enfatiza su preocupación, “no porque la democracia vaya a sucumbir de la noche a la mañana, sino porque se está allanando el camino para un proceso de erosión democrática en cámara lenta, como hemos visto en otros países de todo el mundo”, explica: “Cuando esos partidos de derecha convencionales desaparecen o terminan uniéndose a la extrema derecha, los que sufren son los sistemas democráticos”.
(rml)