Moncloa quiere a la vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, como presidenta del Banco Europeo de Inversiones (BEI) cueste lo que cueste. Esta decisión, que dejaría fuera a Margrethe Vestager, hasta esta semana vicepresidenta de la Comisión Europea, estaría cada vez más cerca y se llevaría a cabo a finales de año. Así, el Gobierno estaría jugando todas las cartas posibles para lograr este objetivo que, tras la decisión esta semana del Banco Central Europeo (BCE) de elegir a la alemana Claudia Buch para encabezar el Mecanismo Único de Resolución (MUS), dejando atrás la candidatura de La vicegobernadora del Banco de España, Margarita Delgado, ha adquirido una nueva dimensión. Según fuentes conocedoras de estos movimientos, cuenta elEconomista.es que la carta de la Agencia Europea contra el Blanqueo de Capitales, AMLA, estaría ahora sobre la mesa.
En este proceso Madrid compite con otras ciudades como Frankfurt (Alemania) o Viena (Austria) para albergar esta institución de nueva creación. Según las mismas fuentes, el Gobierno de Pedro Sánchez estaría dispuesto a traspasar esta agencia a Alemania a cambio de que apuesten por Calviño al frente del BEI. De esta forma, Alemania se haría con el MUS y la agencia europea contra el blanqueo de capitales y España se haría con el organismo que financia grandes proyectos relacionados con el crecimiento de diferentes países.
Golpe a la candidatura
La candidatura de Madrid a la agencia que coordinará a las autoridades nacionales para garantizar que el sector privado aplica correctamente las normas de la UE contra el blanqueo de capitales ha sido apoyada en los últimos meses tanto por gobiernos autonómicos, locales y autonómicos, por lo que las fuentes consultadas por este medio consideran que este movimiento provocaría graves daños a un trabajo que se desarrolla desde hace varios meses a velocidad de crucero. El objetivo de esta agencia es también apoyar a las Unidades de Inteligencia Financiera para mejorar su capacidad analítica en torno a los flujos ilícitos y hacer de la inteligencia financiera una fuente clave para los organismos encargados de hacer cumplir la ley.
Esta cuestión cobra aún más relevancia estos días cuando los Ministros de Economía de la Unión Europea, que son precisamente quienes tienen que tomar esta decisión, se sientan con sus propios Nadia Calvino en el EcoFin informal celebrado en Santiago de Compostela. De hecho, ayer mismo fue la propia Calviño quien defendió la “fuerza” de la candidatura española que ella encabeza, aunque descartó tratar este tema con su tocayo. “No me parece ni el lugar ni el momento”, recalcó, retrasando la decisión final.