Noelia de Mingo da la razón al fiscal y a sus víctimas por 33 años de reclusión en un penal psiquiátrico

Noelia de Mingo, condenada en 2003 por matar a tres personas en la Fundación Jiménez Díaz, ha llegado a un acuerdo con la Fiscalía y sus víctimas para ser internada durante 33 años en una prisión psiquiátrica por la múltiple agresión que protagonizó en El Molar en Septiembre de 2021 en el que dos empleados de un supermercado resultaron heridos, uno de gravedad.
El acuerdo se alcanzó poco antes de la audiencia oral porque una de las perjudicadas se había negado hasta ahora a negociar con su agresor. La acusada, esposada y seria, ha ratificado el acuerdo ante el tribunal, ante el que ha dicho estar de acuerdo con la pena impuesta.
El presidente de la Sección 6, el juez Pedro Javier Rodríguez, ha hecho pública en un comunicado la condena por dos delitos de tentativa de homicidio, con la concurrencia de defensa completa por anomalía psíquica, y por un delito de atentado contra la autoridad.
Una vez que quede libre se le impondrá una orden de alejamiento respecto de sus víctimas, una medida de libertad supervisada por cinco años y no podrá ingresar a El Molar durante este tiempo. Debe indemnizar a una de sus víctimas con 110.000 euros y a otra con 50.000 euros.
A su llegada a esta sede judicial, el abogado de la acusación particular, el letrado Carlos Sardinero, se mostró partidario de un acuerdo siempre que contemplara una pena de prisión o un internamiento psiquiátrico “prolongado y severo” para evitar incidentes más graves. .
Sardinero sostiene que, si bien Noelia padecía esquizofrenia paranoide en el momento del ataque, esta patología no tenía vínculo con los graves hechos ocurridos. “Ella sabía lo que hacía y tenía otras motivaciones”, subrayó el abogado, que pidió inicialmente quince años de prisión para cada víctima, al considerar que los hechos deben calificarse como tentativa de homicidio y no homicidio al no dar a sus víctimas la posibilidad de defenderse.
Durante la investigación se conoció que dos años antes del ataque, Noelia tuvo un incidente por un descuento no aplicado en el mismo supermercado El Molar.
Frente a esto, el abogado defensor sostiene que las facultades mentales de su clienta quedaron completamente alteradas, por lo que exige que se le aplique una defensa completa por locura mental.
El exmédico volvió este lunes a la Audiencia Provincial de Madrid por estos hechos ocurridos 20 años después de ser condenado por el atentado de 2003. Luego fue absuelta de sufrir esquizofrenia paranoide, lo que la eximía de responsabilidad penal. Fue condenada a 25 años de reclusión psiquiátrica, pero en 2017 fue puesta en libertad.
Lo ocurrido en El Molar se produjo cuando la acusada, actualmente ingresada en un centro psiquiátrico penitenciario de Alicante, quedaba en libertad después de que la Justicia sustituyera su internamiento en un centro psiquiátrico por tratamiento ambulatorio y custodia familiar.
Los peritos forenses emitieron un informe en el que hablaron de su evolución favorable, lo que permitió su liberación. Desde entonces apenas salió de su casa y vivió únicamente con su madre, una mujer octogenaria que tuvo que ejercer la custodia familiar para garantizar que su hija no tuviera descompensaciones psiquiátricas por su enfermedad.
Ataques en un supermercado
Los hechos materia de este procedimiento ocurrieron el 20 de septiembre de 2021 cuando el imputado se presentó en un supermercado de El Molar con un cuchillo, apuñalando al dueño y a un cajero. Tras la agresión intentó agredir a unos agentes de la Policía Local pero fue detenida.
En su escrito, la Fiscalía solicita nueve años y nueve meses de prisión por dos delitos de tentativa de homicidio y otro de atentado y exige que se aplique la eximente incompleta de anomalía psíquica.
El fiscal entiende que “en el momento de los hechos padecía un florecimiento de su enfermedad mental en el que su percepción y comprensión de la realidad estaban gravemente alteradas y, por tanto, sus capacidades intelectuales y volitivas quedaban limitadas, aunque no las suprimió”. ”.
Según el fiscal, el imputado fue previamente absuelto de tres delitos de asesinato, cuatro delitos de tentativa de homicidio, un delito de falta de lesiones y un delito de lesiones graves con medios peligrosos al conocerse la eximente plena de locura mental.
En aquella ocasión se le impuso una medida de seguridad de reclusión en un centro psiquiátrico penitenciario por un período máximo de 25 años, medida que fue sustituida el 6 de octubre de 2017 por tratamiento ambulatorio en su domicilio ubicado en la localidad de El Molar y la cual tenía vigencia hasta el 30 de marzo de 2028.
Así, según la Fiscalía, sobre las 11.30 horas del 20 de septiembre de 2021, la imputada acudió a un supermercado de El Molar y, una vez allí, armada con un cuchillo, apuñaló al cajero del costado izquierdo de el abdomen. establecimiento “con la intención de acabar con su vida”.
Luego se dirigió con un cuchillo en la mano hacia un cliente que en ese momento estaba pagando y comenzó un forcejeo con él, para luego dirigirse hacia otro trabajador del supermercado quien salió corriendo a la calle donde cayó al suelo, circunstancia que aprovechó. Ventaja de.
apuñalarlo dos veces por la espalda.
La víctima logró levantarse gracias a la ayuda de varios transeúntes que lograron llamar la atención del acusado y huyó a una farmacia cercana donde pudo refugiarse, “a pesar de que ella lo siguió con el cuchillo en su mano, sin poder acceder a la misma, cuando los empleados allí presentes cierran las puertas”.
Ante el revuelo generado, un equipo de la Policía Local se presentó e intentó someterla y durante el forcejeo atacó con su cuchillo a un agente sin poder alcanzarlo. El imputado se encuentra privado de libertad por este motivo desde el 21 de septiembre de 2021.