Segunda vuelta 2023 | Mariano Cúneo Libarona ya definió su candidata a procuradora, un trío de mujeres para la Corte y planea reformas legales

Mariano Cúneo Libarona no pude soportarlo más ansiedad y el excitación. Hoy se levantó a las cuatro de la mañana y empezó a terminar una carta para un cliente del extranjero. Punto y ella lo llamó cuando ya amanecía. Mientras ella hablaba, el notificaciones del WhatsApp de sus amigos, jueces y fiscales y camaristas: el presidente electo JavierMiley estaba anunciando en una entrevista de radio que iba a ser su futuro Ministro de Justicia.
El penalista, hábil para revertir casos imposibles y hoy decano de la carrera de Derecho de la Universidad del Museo Social, tuvo así su confirmación. Hasta ahora lo veía presentándole proyectos a Milei en reuniones con su hermana Karina, pero este lunes se oficializó el anuncio. Al menos desde agosto pasado, Cúneo Libarona venía trabajando con parte del equipo judicial de Mauricio Macri. el ex ministro alemán garavano participó en esa tarea y algunos de quienes fueron sus funcionarios se preparan para asumir responsabilidades en el Ministerio.
Entre los nombres de los exfuncionarios de la administración Garavano que podrían trabajar con Cúneo Libarona aparecen Juan Benítez; María Fernanda Rodríguez.quien fue Subsecretario de Acceso a la Justicia; Martín Casaresex Jefe de Gabinete del Ministerio de Justicia, y los abogados Marcos Salpionero en la lucha contra el cibercrimen, y Mauricio de Núñez, abogado penalista empresarial y abogado de la Embajada de Francia desde hace 30 años. También se busca a un exfuncionario para que se encargue de la presentación de Argentina ante el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI), que en abril del próximo año examinará las políticas antilavado de dinero del país, actualmente bajo escrutinio.
El futuro ministro tendrá que tomar muchas decisiones durante la primera semana y el primer mes de su mandato. Por ejemplo, la crisis que estalló desde El Servicio Penitenciario Federal dejó de aceptar presos de la Ciudad y no hay ningún lugar donde colocarlos. A más largo plazo, es necesario decidir qué hacer con los documentos de los jueces que esperan tratamiento en el Senado –si serán retirados y propuestos nuevos candidatos–, la estructura del Servicio Penitenciario Federal, donde desapareció la inteligencia criminal, el futuro de la Inspección General de Justicia (IGJ), donde más allá de los técnicos, hubo una mirada ideológica y política al control de empresas y fundaciones.
Finalmente se debe definir la nueva gestión de la empresa. Oficina Anticorrupciónque el nuevo Ministro de Justicia planea ofrecer a la oposición, indicaron sus allegados LA NACIÓN. Cúneo Libarona le propondrá a Milei que la oposición le envíe una terna de candidatos que luego deberán ser designados por el presidente. La organización sigue dependiendo funcionalmente del Poder Ejecutivo, lo que hace frágil su permanencia.
Tras la confirmación de Milei, en unas horas Cúneo Libarona recibió llamadas de felicitación de dos magistrados de la Corte (solo charló con uno), cuatro magistrados de la Cámara de Casación y seis jueces y camaristas federales. Hay entusiasmo en su equipo, hasta el punto de que no faltan las exclamaciones altisonantes. “Vamos por la gloria”, dijo LA NACIÓN alguien cercano al abogado.
Las casillas más importantes que debe completar el próximo Gobierno en Justicia son una vacante en la Corte Suprema de Justicia y el nombre de futuro Fiscal General de la Nación. El cargo de fiscal jefe está vacante desde la renuncia de Alejandro Gils Carbó en 2017. Mauricio Macri y Alberto Fernández no lograron nombrar un fiscal, para lo cual se requiere el voto de dos tercios del Senado. Por esta razón, desde 2017 el abogado interino es Eduardo Casal.
En sustitución de Casal se escucha el nombre de un hombre de Justicia, un actual funcionario judicial, con 45 años de experiencia. Se habla del miembro de la Cámara del Crimen Marcelo Lucini, un juez con mucha experiencia, muy bien considerado, que ya tiene tres años de jubilación y que tiene una relación personal con Cúneo Libarona. No hay nada formal todavía y Tu postulación debe pasar el filtro Milei, pero allegados al futuro ministro confían en que no habrá problemas para que reciba el aval del Congreso. “Es un diez”, se entusiasma el flamante equipo jurídico.
Hermano mayor de otros tres penalistas, Cúneo Libarona conoce la jurisdicción de la investigación, su padre fue fiscal ante la Cámara durante años, tiene allí muchos amigos y conocidos, e incluso saludó un proyecto que circula desde hace más de un año. década para diseñar una jurisdicción especial para delitos complejos, que abarca la ciudad de Buenos Aires, el conurbano e incluso Rosario. Una forma de licuar el poder de los jueces federales de Comodoro Py.
El otro vacante clave está en la cancha. Tras la renuncia de Elena Highton de Nolasco, el máximo tribunal quedó con cuatro magistrados y se busca uno para ocupar su lugar. Cúneo Libarona y Garavano coincidieron un trío de candidatos el cual también deberá ser aprobado por Milei.
El modelo a seguir es el de Donald Trump, quien nominó al juez conservador para la Corte de Estados Unidos Amy Coney Barrett, un jurista de sólo 48 años, destinado a ocupar un escaño en el máximo tribunal durante al menos 25 años más.
En ese sentido, el trío de mujeres en la cartera de Cúneo Libarona tiene casi cincuenta años, no tiene participación política ni amistad con Milei, además de tener “gran capacidad técnica y profesional”. Sólo se conoce el nombre de una candidata: el equipo de Cúneo Libarona realizó una búsqueda entre las mujeres que ocupan cargos relevantes en los tribunales y terminó poniendo la mira en Ivana Blochfuentes judiciales dijeron LA NACIÓN.
Bloch es magistrado del Tribunal Oral en lo Penal N°4, con diploma honorífico de la Facultad de Derecho de la UBA, profesor de leyes por la Universidad de Würzburg (Alemania), cualificado con grandes elogios, y profesor de la Universidad de San Andrés. Sagitariara, de 54 años, pasó por el Consejo de la Judicatura y fue secretaria jurídica de la Corte en el despacho de Carlos Fayt.
Cúneo Libarona tiene diálogo con los jueces de la Corte, con unos más que otros, y respeto por todos. Su idea es que sus miembros sean dueños de la ley en sus fallos, más allá del lógico papel político del máximo tribunal. Uno de los objetivos del nuevo ministro es concluye el juicio político de la Corte que se tramita en la Cámara de Diputados. Cierra el asunto. El proceso se tramita en la Comisión de Impeachment de la Cámara Baja, que aún no ha votado el fallo del impeachment. Podría hacerlo con la mayoría kirchnerista antes del 10 de diciembre, pero no pasará a la Cámara, donde el oficialismo no tiene los votos para aprobarlo. Si el dictamen es aprobado por la Comisión, tendría rango parlamentario durante todo 2024.
Para organizar el trabajo que deberá afrontar a partir del 10 de diciembre, el futuro ministro preparó Pequeños equipos con abogados especializados, con quienes trabajan por separado en diversos temas.. Entre las prioridades de su nueva gestión está la elaboración de una ley que regule el plazo razonabledejalo ser juicios rápidos; lanzar de manera integral en todo el país el nuevo Código Procesal Penal Federal, que otorga mayor autonomía a los fiscales ante los jueces; trabajar con una ley de juicios por jurado; impulsar un nuevo Código Penal que sea síntesis del propuesto por Mariano Borinsky con un equipo de juristas y un proyecto previo; y reformar el reglamento del Consejo de la Judicatura para dinamizar los nombramientos de jueces y sus remociones, entre otras ideas.
El equipo del futuro ministro prevé pasar diciembre y enero preparando los proyectos de ley, para presentarlos en febrero si el Poder Ejecutivo convoca a sesiones extraordinarias.