JLF, para algunos de sus vecinos Pepe, era uno de los ilicitanos que pasan desapercibidos en la calle Alfredo Sánchez Torres, en el populoso barrio de Carrús de Elche donde nadie recuerda los años que vivió allí en un piso aparentemente familiar que heredó con su hermana. Luego de su retiro tenía 67 años, lo veían frecuentemente en las tiendas del barrio comprando o dando un paseo, algunos afirman sin mucha información que había trabajado buena parte de su vida de joven en una farmacia en el centro de la ciudad que no conocía. Saben cómo dar cuenta de su ubicación.
El domingo por la noche su cuerpo fue encontrado en medio de un charco de sangre por los bomberos que habían entrado en la casa por una ventana después de que una llamada al servicio de emergencias “112” advirtiera que algo había sucedido en el piso donde durante más de dos décadas yo Sólo lo había visto entrar. La Comisaría se negó ayer a celebrar cualquier tipo de manifestación después de que el juzgado de turno decretara el secreto de las actuaciones. Al menos dos personas han prestado declaraciones sobre estos hechos ante el grupo de Policía Judicial del Cuerpo Nacional de Policía y serían detenidas por estos hechos, aunque puede haber más implicados. En cualquier caso, todo indica que habrá una resolución judicial muy rápida que esclarezca lo ocurrido la noche del domingo en la casa.
Huellas
Las manchas de sangre se evidenciaban ayer tanto en el suelo como en las paredes del rellano de escaleras del edificio situado en el número 75. Huellas que seguramente fueron recogidas por el grupo de Policía Científica de la Comisaría que se encargó de peinar la escena del crimen. . Aún poco se sabe de lo ocurrido.
Lo cierto es que sobre las diez de la noche se recibió una llamada de vecinos asegurando haber escuchado mucho ruido en la casa y luego silencio. Alguien se acercó a la casa y no escuchó nada. Tocaron el timbre y nadie respondió por lo que decidieron avisar a las autoridades. En cuestión de minutos llegaron bomberos y Policía Local, entraron los primeros en el inmueble y certificaron la muerte del propietario por apuñalamiento. A partir de ese momento se activó el protocolo policial. A las 22.30 horas la casa se llenó de agentes, hizo acto de presencia el coche fúnebre y la comisión judicial con el forense se dirigió al inmueble para encargarse del levantamiento del cadáver.
Dependencias
Un vecino explicó que desde hacía unos días veía a jóvenes entrar a la casa, incluso cuando el dueño no estaba, sin que esta información permita saber si alguno de ellos tiene relación con lo sucedido. Durante la noche los investigadores pudieron atar cabos sobre lo sucedido porque la escena del crimen y el hecho de que nadie se detuviera a borrar rastros sugerían que todo había sucedido apresuradamente.
Este es el Segundo delito que se produce en la provincia de Alicante en las últimas 72 horas. El pasado sábado, en Orihuela Costa, fue descubierto el cuerpo de una mujer británica de 76 años, también apuñalada, hechos por los que su pareja, un noruego de 82 años, ha sido encarcelado en lo que es una nueva y terrible caso de violencia doméstica.